ÍNDICE POR ÉPOCAS

EDAD MODERNA

83. LAS SOCIEDADES ECONÓMICAS DE AMIGOS DEL PAÍS: LA ILUSTRACIÓN  · A. Peiró Arroyo.

Las Sociedades de Amigos del País fueron sin duda la creación más importante de la Ilustración, a partir del nacimiento de la Vascongada (1765) y de la Matritense (1775), esta última apoyada por el Conde de Aranda y favorecida por el Consejo de Castilla.

Cuando en 1776 se creó la Real Sociedad Económica Aragonesa de Amigos del País contaba apenas con 272 miembros, distribuidos en 37 poblaciones aragonesas y 15 del exterior. De ellas 199 personas (el 73,6%) se concentraban en Zaragoza, ciudad a la que seguían muy de lejos Calatayud (cinco miembros), Alagón, Alcañiz y Teruel (tres en cada una), Belchite y Monzón (dos en cada una). Otras 29 poblaciones contaban cada una con un único miembro.

Fuera de Aragón destacaban Barcelona y Madrid (con cuatro miembros cada una), seguidas por Murcia (con dos); mientras otras 12 poblaciones contaban con un solo miembro. Entre estas, cabe citar Amsterdam y Bayona, puntos importantes del comercio internacional.

A pesar de esta amplia implantación geográfica, todas las actividades de la Económica, así como las diversas escuelas creadas, se desarrollaron en Zaragoza. Unicamente las escuelas y el Establecimiento de Caridad instalado en Peñaflor en 1784 se situaban fuera de la capital del reino; aunque apenas a 14 km. de ella.

Lo que permite hablar de un ámbito realmente aragonés para la Económica no es tanto esta presencia puntual en algunas poblaciones (que posteriormente se vio notablemente aumentada), como el papel que en ella desarrollaron personas que, a pesar de tener su residencia en Zaragoza, contaban con importantes intereses económicos en todo el reino.

En efecto, a la Económica pertenecieron desde el primer momento figuras importantes de la nobleza, como el Duque de Híjar; los Condes de Aranda, Argillo, Atarés, Fuenclara, Fuentes, Ricla, Robres, Sástago, Sobradiel y Torresecas; los Marqueses de Ariza, Ayerbe, Castelar, Estepa, Lazán, Mora, Tosos, Villafranca y Villasegura; es decir, la primera nobleza del reino, entre la que se encontraban once Grandes de España.

La presencia junto a ellos de numerosos cargos públicos (el Intendente General del Ejército y Reino; los corregidores de Zaragoza y Teruel; los alcaldes mayores de Zaragoza y Alcañiz; así como la mayor parte de los miembros de la Audiencia de Aragón); de la Iglesia (casi todo el Cabildo de Zaragoza, encabezado por su Deán) y del mundo de los negocios, determinaba que la Económica tuviese un conocimiento de la realidad aragonesa mucho mayor del que podría desprenderse de su composición. Este conocimiento fue completado por las diversas peticiones de información que realizó la Económica.

Precisamente la actividad fuertemente centralizada de la Económica Aragonesa pudo ser una de las causas que moviesen a la creación de sociedades semejantes en el resto de Aragón. En abril de 1782 los cuatro miembros con que ésta contaba en la ciudad de Jaca, promovieron una sociedad semejante en esta ciudad. La Sociedad Económica de Amigos del País de la Ciudad de Jaca y sus Montañas se fundó en octubre de 1783, desgajándose sus miembros de la Aragonesa.

La Sociedad tuvo un rápido crecimiento, y al ser aprobados sus estatutos contaba ya con 40 miembros en Jaca. La causa de este crecimiento es fácil de comprender: frente a la posición subalterna que los jaqueses tenían con respecto a la Económica, eran quienes detentaban el gobierno efectivo de la nueva sociedad. Su extensión territorial se realizó sobre todo en la Jacetania, aunque tuvo algunos miembros fuera de esta comarca.

10 de sus miembros residían en San Juan de la Peña, 7 en Zaragoza, 5 en Berdún, 3 en Canfranc, Huesca y Monasterio de San Victorián, 2 en Ansó, Bergua, Broto, Castiello de Jaca, Ena, Lastiesas, Panticosa y Yuste. Otras 56 personas habitaban en poblaciones con un único miembro. En el resto de España, vivían 30 personas en Madrid, 4 en Barcelona y 13 en otras tantas poblaciones dispersas. En el extranjero vivían otras 6 personas.

Conviene destacar que la mitad de sus miembros eran eclesiásticos y entre ellos se encontraba un número importante de curas párrocos de pequeñas poblaciones. De este modo, aunque la nómina de sus componentes no contenía nombres tan notables como la de la zaragozana, la efectividad con la que sus planteamientos llegaron a una parte importante de la población debió de ser muy superior.

Posiblemente persiguiendo este mismo modelo, e intentando que los centros de decisión de las Sociedades se encontrasen lo más cerca posible de los propios ilustrados, en 1803 se solicitó la creación de una Sociedad Económica en Teruel. El balance positivo que la Económica de Jaca (haciendo pasar el número de ilustrados organizados en esta ciudad de 4 a 40 en breve tiempo) no pudo repetirse en Teruel, pues la actividad de este tipo de sociedades se hallaba ya en descenso. Unicamente en 1834 pudo crearse una sociedad económica en Teruel, desde unas perspectivas totalmente distintas a las de finales del siglo anterior.

BIBLIOGRAFÍA

.ÁLVAREZ JUNCO, J. (1986): «La Sociedad Aragonesa de Amigos del País en el siglo XVIII». Revista de Occidente, 69, pp. 301-319. Madrid.
.CORONA, C. E. (1977): «La Sociedad Económica de Amigos del País de la Ciudad de Jaca y sus Montañas». Boletín de F.I.E.S., pp. 35-46.
.DEMERSON, R de; DEMERSON, J. (1978): «La Real Sociedad Económica de Jaca y sus montañas (Datos para su historia)». Argensola, 86, pp. 359-390. Huesca.
.-- (1777): Estatutos, aprobados por Su Magestad, para el gobierno de la Real Sociedad Económica de los Amigos del País, establecida en la Imperial Ciudad de Zaragoza. Zaragoza.
.FERNÁNDEZ CLEMENTE, E. (1973): La ilustración aragonesa. Una obsesión pedagógica. Zaragoza.
.FORNIÉS CASALS, J. F. (1978): La Real Sociedad Económica Aragonesa de Amigos del País en el período de la llustración (1776-1808): sus relaciones con el artesanado y la industria. Madrid.
.INFANTE J. (1984): (ed. Iit.) La Cátedra de Economía Civil y Comercio de Zaragoza fundada y sostenida por la Real Sociedad Económica Aragonesa de Amigos del País (1784-1846). Zaragoza.
.NORMANTE Y CARCAVILLA, L. (1984): Discurso sobre la utilidad de los conocimientos Económico-Políticos, y la necesidad de su estudio metódico; Proposiciones de Economía Civil y Comercio; Espíritu del Señor Melón en su Ensayo político sobre el Comercio. Zaragoza.
.PASCUAL DE QUINTO Y DE LOS RÍOS, J. (1983): Catálogo de la Publicaciones e Impresiones de la Real Sociedad Económica Aragonesa de Amigos del País (1776-1982). Zaragoza.

Ampliar mapa

  2005 Instituto Fernando el Católico