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24. EUROPA OCCIDENTAL EN 476

Aunque de manera precaria, el Imperio Romano logró sobrevivir durante casi tres siglos no sólo frente a la descomposición de sus propias estructuras [v. mapa 23], sino también frente a la presión de los "pueblos germánicos".

Ciñéndonos exclusivamente al Occidente europeo, en el año 476, fecha oficial de la desaparición del Imperio Romano, observamos todo un mosaico de pueblos, establecidos en calidad de "federados" de Roma. El mapa que consideramos constituye tan sólo una instantánea, pues la movilidad fronteriza fue constante. Incluso algunos de los territorios plasmados en él dejarían pronto de existir, como ocurrió, por ejemplo, con el reino de los Vándalos, desmembrado a la muerte de su creador, Genserico. Exactamente igual ocurrió con el reino de Siagrio, pronto absorbido por los Francos. O con Odoacro en Italia, el auténtico detonante que llevó al Imperio a la muerte oficial. En la Península Itálica, a finales del siglo V, serían los Ostrogodos los herederos, hasta convertirse en árbitros de Europa occidental con Teodorico el Grande.

Desde el punto de vista hispano, interesa sobre todo la contemplación de los reinos Franco y Visigodo. La desigualdad existente entre ambos en el mapa es sólo aparente, porque los primeros van a ser capaces de invertir este "status", expulsando a los Visigodos de casi todas las Galias [v. mapa 25].

El año 476 tiene, en definitiva, un significado especial dentro de la historia de la humanidad y, más concretamente, del escenario occidental.