Introducción | Índice temático | Índice de mapas |
Tras la conquista de Sicilia por Roma en 241 a.C., fruto de su victoria frente a los cartagineses al término de la "primera guerra púnica", tuvo lugar la primera organización administrativa en provincias, en la que, naturalmente, Hispania aún no tenía cabida.
a) La primera organización provincial de la parte conquistada en nuestra Península tuvo lugar poco después del desalojo de ésta por los cartagineses, en 206 a.C., surgiendo dos provincias en 197 a.C., la Hispania Ulterior (la del lado de allá de Roma) y la Hispania Citerior (la del lado de acá de Roma), cuyos límites se situaron en Urci (Almería). Las nuevas tierras incorporadas posteriormente por efectos de la conquista [v. mapa 13] pasaron a depender de una u otra, hasta que Augusto, dominada toda la, Península, acometiera dos sucesivas divisiones. De momento, todo el actual Aragón quedaba dentro de la Hispania Citerior.
b) A Augusto debemos la primera remodelación provincial hispana, en el año 27 a.C., retocada poco después, entre los años 7 al 2 a.C. y que, por su importancia, estudiamos aparte [v. mapa 17].
c) Esta última distribución perduró más de doscientos años hasta que, en 212 d.C., Caracalla acometiera una tímida reforma, desgajando la actual Galicia de la enorme provincia Tarraconensis ideada por Augusto.
d) Por último, una de las medidas administrativas adoptadas por Diocleciano para intentar poner freno a la crisis del Bajo Imperio fue la de realizar una nueva distribución provincial, multiplicando el número de circunscripciones. Esta reorganización tenía lugar en 293 d.C. y sería la última. Su importancia nos obliga también a considerarla aparte [v. mapa 18].